¡Hola, bienvenido a nuestro blog! Si llegaste hasta aquí, debes haberte dado cuenta que la revolución de los datos ha comenzado y estás interesado en saber más sobre los servicios y productos de Brintell.
Pero antes de hablar de negocios, nos gustaría contarte un poco sobre nuestra historia y cómo comenzamos. Lo consideramos importante para que puedas comprender mejor porqué hacemos lo que hacemos. ¿Te parece?
En breves palabras, Brintell es una empresa que promueve soluciones de análisis de datos para ayudarte a traducirlas a un lenguaje de fácil comprensión. Pero, aunque los datos y las cifras han sido nuestro negocio durante cuatro años, son las personas quienes forman nuestra estructura. En esta trayectoria, entre errores y aciertos, los desafíos fueron el combustible para que llegáramos a lo que somos hoy. Y así, como cualquier empresa, Brintell nació como una idea concebida por alguien: el creador y fundador, Alex Cordón. Aquí conocerás una parte de su historia y cómo culminó con el nacimiento de sus dos empresas.
El inicio
Alex nació y creció en Guatemala, con su madre. Cuando joven, al ver que su padre se instaló en Brasil, decidió correr el riesgo y tomar la oportunidad de viajar con él. Trayendo consigo su pasaporte, un comprobante de matrícula para su carrera de ingeniería civil en la Universidad de Brasilia y la voluntad de experimentar nuevos trabajos, Alex aterrizó en Brasilia. Él no hablaba portugués ni conocía a nadie en la ciudad, además de su padre, madrastra y hermano. Y tampoco tenía idea de cuánto tiempo estaría en el país.
No demoró mucho para que Alex llamara a la capital de Brasil, hogar. A pesar de que estudiaba ingeniería civil, Alex pronto se interesaría por áreas como la computación gráfica y el geoprocesamiento - este último, años más tarde, se convirtió en su especialidad. Pronto las oportunidades laborales comenzaron a surgir y el geoprocesamiento aplicado al desarrollo de juegos de guerra fue una de sus primeras experiencias profesionales.
En los años siguientes, Alex ganó experiencia en el área de ingeniería en diversos servicios y trabajos cada vez más complejos. Aún así, Alex quería enfrentar desafíos mayores: la reinvención era parte de su ADN. Es así como comenzó su jornada empresarial.
Después de algunos años y dos intentos de emprendimientos, acompañado de un equipo profesional, comenzó a desarrollar nuevas tecnologías en el área de geoprocesamiento, en las cuales crearon un interfaz futurista basado en nuevas tendencias de UX y UI, integrando datos analíticos con mapas e información geoespacial. La empresa, así como Alex, fueron nominados aliados del año en Oracle Excellence Award y tuvieron una oportunidad de recibir el premio en Washintong, EE. UU.
Fue también el escenario americano donde comenzó a tomar forma el concepto de una empresa innovadora en análisis de datos. En el 2016, Alex y el equipo de desarrolladores fueron a un restaurante en Silicon Valley, famoso por ser frecuentado por figuras como Jeff Bezos y Steve Jobs. Inspirados por el aura del lugar, el grupo decidió aceptar la misión de abrir una empresa de tecnología. Así nació Brintell.
Brintell
Superar desafíos está en el ADN de Brintell y de todos los que participaron en su creación. Además de Alex Cordón, otros profesionales de la tecnología estuvieron presentes en los inicios de la empresa, como Henrique Gomes (entonces socio fundador) y Rodrigo Cipullo.
Brintell, fundada en 2016, comenzó con un propósito que se mantiene hasta hoy: promover una experiencia de datos personalizados específicamente para cada cliente. Con esto en mente, nació el primer y más emblemático producto de Brintell: Intelli Suite, un software que traduce datos a un lenguaje de fácil comprensión y alto impacto visual en un interfaz, el cual es el rostro del cliente. Parece excelente, ¿no? Pero al principio, no fue tan fácil vender esta idea al mercado americano. En el primer año de vida, escuchamos innumerables veces que los clientes no creían en el potencial de nuestra tecnología.
En el 2017, el equipo que estaba inicialmente compuesto por solo tres personas comenzó a crecer. Contratamos colaboradores de todo Brasil y del mundo. Actualmente tenemos aliados presentes en Estados Unidos, Europa e India. El segundo año de vida de Brintell estuvo marcado por la expansión del equipo, los productos y servicios ofrecidos. El formato home office, adoptado desde el inicio de las actividades de la empresa, hasta hoy nos permite superar las barreras de distancia y zona horaria para ofrecer los mejores resultados posibles.
Brintell es una empresa que nació con estatus internacional: los primeros clientes fueron de Estados Unidos. Después de dos años de servicio en el mercado estadounidense, en 2018 llegó el momento de traer la revolución de los datos a Brasil, lo que representó un momento de mucha felicidad para nosotros. Así, comenzamos a atender a clientes de iniciativa privada y pública en diversos estados brasileños. También en 2018, pasamos a ser asesorados por Gartner, una de las mayores consultoras del mundo para empresas de tecnología, que ofrece insights y tendencias de mercado, lo que nos ha ayudado a desarrollar servicios y productos más acorde a nuestros clientes.
En 2019, Brintell comenzó a invertir en proyectos de las áreas de inteligencia artificial y móvil aplicada a la agrotecnología. Hoy en día, contamos con diversos productos y servicios, desarrollados por un equipo de aproximadamente 25 profesionales que comparten el deseo de superar desafíos y entregar soluciones cada vez más precisas.
En 2020, tras una idea concebida durante un entrenamiento y muchos meses de planificación, Brintell dio a luz a una nueva empresa: UpData Studio.
Nuestro ADN
"En Brintell, nosotros volamos y cambiamos el motor al mismo tiempo". En esta frase, Alex Cordón sintetiza las características de innovación y adaptabilidad que impregnan todos nuestros sectores. Cuatro años y muchos logros, después de aquel almuerzo en el Silicon Valley, Alex cree que aún no ha "llegado allá". Para él, siempre es posible ir más allá, pues la tecnología cambia todos los días y Brintell necesita mantener ese ritmo así, los desafíos se convertirán en nuestro combustible. Pues, en la práctica, innovar es cometer errores. Errar, Errar una vez más. E intentarlo de nuevo hasta acertar. Como dijo Steve Jobs dijo alguna vez "Puedes afrontar un error como un error que hay que olvidar, o como un resultado que apunta a una nueva dirección". Así que, ¿vamos juntos hacia la revolución de los datos?